¿Qué depara el futuro de los precios de los combustibles en 2024? Esta interrogante se convierte en el epicentro de la discusión entre el Gobierno Nacional y los gremios del transporte en Colombia. Más ahora que el Ministerio de Hacienda confirmó que el FEPC generará un deficit de 21 billones de pesos del 2023 y al 2025 la deuda acumulada será de $100 billones.
Las mesas técnicas, que se han inaugurado este miércoles en Bogotá, buscan determinar los incrementos de la gasolina y el diésel (ACPM). La tensión crece a medida que las partes exponen sus posturas.
El ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla, dejó claro desde el comienzo que el Gobierno no «aceptará chantajes». Esta declaración, realizada en Bogotá ante los medios de comunicación, refleja la postura del presidente Gustavo Petro y las propuestas del Gobierno para aumentar los precios de los combustibles, en especial del ACPM, a partir de 2024.
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Por su parte, los gremios del sector de empresas propietarias de camiones, buses y vehículos de carga pesada, en particular los representados en la Cámara Intergremial del Transporte, se han manifestado en contra del aumento de precios y abogan por mantener los niveles actuales.
Alfonso Medrano, presidente de la Cámara Intergremial, argumenta que el aumento del precio del ACPM tendría un impacto significativo en el costo de vida del país y en la economía nacional. Además, señala que esto conduciría a la reevaluación de las tarifas de transporte.
Impacto del alza del ACPM en el sector de transporte
El gremio del transporte terrestre de carga destaca que el ACPM representa entre el 40% y el 60% de los costos operativos de su sector. Cualquier aumento tendría un profundo impacto en los más de 400 mil camiones, volquetas y tractocamiones, así como en los cerca de 200 mil buses, busetas y microbuses que transitan por las vías nacionales y urbanas. Además, se estima que afectaría a los 1,8 millones de empleos, tanto directos como indirectos, relacionados con el transporte.
Alfonso Medrano Solano enfatiza: «No estamos defendiendo nuestro sector. Queremos hacer reflexionar al Gobierno sobre las consecuencias de un aumento en el precio del ACPM, ya que esto tendría un impacto devastador en la economía, especialmente en los costos de transporte de alimentos y pasajeros».
Déficit alcanzó los 21 billones de pesos
El ministro Ricardo Bonilla advirtió que el déficit en el Fondo de Precios de los Combustibles se ha profundizado, alcanzando los 21 billones de pesos. De esta cifra, 16 billones corresponden al diésel y 4 billones a la gasolina.
Cabe destacar que MinHacienda había publicado que el déficit sería de 20 billones y minutos después, la información fue eliminada de la cuenta oficial, para luego modificar el monto del déficit a 21 billones. El estimado también fue modificado de 100 a 104 billones. A continuación dejamos el capture del trino anterior y el tuit del actual.
Este déficit se debe en parte a la medida tomada por Colombia durante la pandemia de la Covid-19 en 2020, congelando los precios de los combustibles cuando el precio del petróleo era de 76 dólares por barril. Hoy en día, los precios del petróleo se sitúan en 84 dólares.
Bonilla señaló que Ecuador y Bolivia también optaron por congelar los precios de los combustibles, asumiendo costos significativos. Para Colombia, estos costos alcanzaron los 100 billones de pesos en 2021, equivalente a cinco reformas tributarias, según el ministro de Hacienda.
Los 21 billones de déficit en el Fondo de Estabilización de Precios de los Combustibles representan una suma considerable que se compara con la reforma tributaria aprobada por el Congreso en 2022, según lo destacado por Ricardo Bonilla. La discusión entre el Gobierno y los gremios del transporte continúa mientras buscan alcanzar un acuerdo sobre el futuro de los precios de los combustibles en Colombia en 2024.
