El pasado domingo 23 de febrero, aproximadamente a las 5:45 am, el reconocido artista de rap conocido como «Clandestino» fue víctima de una agresión mortal en el sector de San Bernardo, Bogotá. Según testigos presenciales, Orlando Cortés Bojacá, cuya imagen circula en redes sociales, propinó un fuerte cabezazo al artista y lo mató de manera inmediata.
Este trágico suceso ha generado conmoción en la comunidad artística y entre los seguidores del hip hop en la capital. Familiares y amigos de «Clandestino» exigen a las autoridades una pronta acción para localizar y capturar al presunto agresor, buscando que se haga justicia por la pérdida del talentoso músico.
Este incidente se suma a otros actos de violencia que han afectado a artistas en Bogotá. En agosto de 2024, los jóvenes Camilo Sánchez y Camila Ospitia fueron asesinados en el parque El Porvenir, en la localidad de Bosa. Ambos eran miembros activos de colectivos artísticos y ambientales locales, y su muerte desató una ola de indignación y protestas en la ciudad. La comunidad denunció en ese entonces la complicidad entre bandas de microtráfico y algunas autoridades, señalando una persecución constante hacia quienes promueven actividades culturales y comunitarias.
La repetición de estos hechos violentos pone en evidencia la creciente inseguridad que enfrentan los artistas urbanos en Bogotá. La comunidad exige medidas efectivas por parte de las autoridades para garantizar la protección de quienes dedican su vida a la promoción de la cultura y el arte en la ciudad.