El cofundador de Microsoft, Bill Gates, ha anunciado su intención de donar el 99% de su vasta fortuna en los próximos veinte años, acelerando significativamente sus contribuciones caritativas a través de la Fundación Gates. El magnate de 69 años expresó su determinación de que su legado no se defina por la riqueza acumulada, sino por el impacto de sus donaciones.
En una entrada de blog publicada este jueves, Gates citó el influyente ensayo de Andrew Carnegie «El Evangelio de la Riqueza», que postula la responsabilidad de los individuos acaudalados de devolver su fortuna a la sociedad. Haciéndose eco de la célebre frase de Carnegie, «El hombre que muere así de rico muere deshonrado», Gates reafirmó su compromiso con la filantropía.
La Fundación Gates, que ya ha destinado 100.000 millones de dólares a proyectos de salud y desarrollo, planea desembolsar otros 200.000 millones en las próximas dos décadas, una cifra que podría ajustarse según la evolución de los mercados y la inflación.
Este aumento en las donaciones marca un cambio en los planes iniciales de Gates y su exesposa Melinda, quienes originalmente contemplaban la continuidad de la fundación durante varias décadas después de su fallecimiento.
Al explicar esta aceleración en una entrevista con la BBC, Gates señaló que en 20 años existirán otras personas con recursos para abordar los desafíos futuros de manera efectiva. «Se trata realmente de la urgencia», afirmó. «Podemos gastar mucho más si no buscamos la perpetuación, y sé que el gasto estará en consonancia con mis valores».
Mega millonario
A pesar de esta ambiciosa promesa de donación, el 1% restante de su fortuna aún podría convertir a Gates en multimillonario. Según el índice de multimillonarios de Bloomberg, el fundador de Microsoft se sitúa actualmente como la quinta persona más rica del mundo, con un patrimonio neto estimado en 108.000 millones de dólares. En su publicación de blog, compartió una representación gráfica de su patrimonio neto descendiendo drásticamente hacia cero para el año 2045.
Gates también detalló los tres objetivos principales de su fundación: la erradicación de enfermedades prevenibles que afectan a madres y niños, la eliminación de enfermedades infecciosas como la malaria y el sarampión, y la reducción de la pobreza extrema para cientos de millones de personas.
En un tono crítico, Gates lamentó los recortes en los presupuestos de ayuda exterior por parte de países como Estados Unidos, el Reino Unido y Francia, cuestionando el compromiso de las naciones más ricas con las poblaciones más vulnerables del planeta.
«No está claro si los países más ricos del mundo seguirán defendiendo a sus habitantes más pobres», escribió. «Pero lo único que podemos garantizar es que, en todo nuestro trabajo, la Fundación Gates apoyará los esfuerzos para ayudar a las personas y a los países a salir de la pobreza».
En su entrevista con la BBC, Gates fue directo al abordar sus críticas hacia el multimillonario tecnológico Elon Musk por los recortes en la ayuda estadounidense, llegando a afirmar que estas acciones «no sólo matarán a niños, sino a millones de niños». También mencionó la cancelación de subvenciones a un hospital en Gaza, un tema sobre el que Musk inicialmente difundió información errónea.