“Definitivamente se descarta”, con esa frase lapidaria, el diputado conservador Giovanny Molina confirmó lo que se venía rumoreando en los pasillos políticos del Tolima: José Elver Hernández, alias ‘Choco’, no hará parte de la lista del Partido Conservador a la Cámara de Representantes. La decisión, tomada por el núcleo duro del Barretismo, pone punto final a las aspiraciones de uno de los políticos más conocidos del departamento, pero también uno de los más polémicos.
El mensaje vino con voz de mando. Molina, hombre de confianza del senador Óscar Barreto, aseguró que la decisión está tomada. “El cupo que falta lo define el senador”, dijo en una entrevista, dejando claro que Hernández no cuenta ni con el respaldo, ni con el perdón del Barretismo. El nombre del reemplazo aún no se conoce, pero será alguien que cumpla con los criterios de paridad y obediencia al líder del conservatismo en la región.
Historia
Para entender la caída de ‘Choco’ hay que remontarse a las elecciones de 2023, cuando tomó la arriesgada decisión de apoyar a Johana Aranda a la Alcaldía de Ibagué, contradiciendo las directrices de su propio partido. Ese movimiento le costó caro. Desde entonces, representantes conservadores como Alejandro Martínez, Delcy Isaza y Gerardo Yepes lo señalan de desleal, y se han encargado de bloquear cualquier intento de su regreso.
Aunque ha intentado negociar su retorno apelando a su trayectoria dentro del partido, los resultados han sido nulos. Incluso su último bastión, el senador Miguel Barreto, no ha logrado revertir el veto impuesto por las directivas regionales. La presidenta del Directorio Conservador del Tolima, Delcy Isaza, ha sido tajante: no firmará el aval de ‘Choco’.
Hernández podría acudir al Directorio Nacional, donde la senadora Nadia Blel tiene la última palabra. Sin embargo, allí tampoco parece tener aliados. La desconfianza sobre su lealtad lo persigue como una sombra, y ni siquiera su récord de haber alcanzado 30.000 votos en el pasado parece salvarlo. Hoy, sus fuerzas están mermadas. Las proyecciones más optimistas le dan apenas 20.000 votos, una cifra insuficiente para disputar poder dentro de una lista pensada para garantizar el control absoluto del Barretismo.
A pesar de que ha recibido coqueteos del Partido de la U y del Centro Democrático, ninguna de esas propuestas se ha materializado. Los tiempos apremian, y el panorama es cada vez más estrecho para un político que alguna vez fue protagonista y hoy parece condenado al olvido.
Lo ocurrido con ‘Choco’ no es un simple episodio interno. Es la muestra de una fractura profunda dentro del conservatismo tolimense. Es la confirmación de que, en este nuevo escenario político, no hay espacio para las medias tintas ni para quienes se atreven a desafiar las reglas del poder.
El Barretismo ha decidido cerrar filas. Y en esa reconfiguración, el nombre de José Elver Hernández ya no cabe. Su exclusión marca no solo el fin de una aspiración, sino el cierre de un ciclo que, para muchos, debió terminar hace tiempo.