El accionar criminal en el norte del Cauca afectó de manera significativa el servicio a más de 16 mil suscriptores al servicio de energía eléctrica, dijo la Compañía Energética de Occidente, CEO.
Daños colaterales
De acuerdo con lo expuesto por la firma, el daño se ocasionó producto de un ataque contra la base militar dispuesta en Santander de Quilichao, sector en donde opera una subestación de alta potencia y que resultó con daños debido a la ignición de un artefacto explosivo dirigido contra la fuerza pública.
“16.570 clientes del norte del Cauca se quedaron sin servicio de energía, como consecuencia del ataque con explosivos dirigido a la base militar del municipio de Santander de Quilichao en el barrio San Bernabé que colinda con la subestación de energía; evento que provocó daños en la infraestructura eléctrica e instalaciones”, aseveró la CEO.
Los hostigamientos afectaron la línea de 34.5 kV que suministra energía a los municipios de Santander de Quilichao, Caloto, Caldono y Buenos Aires. Obligando a la compañía a dirigirse hacia la zona bajo custodia del Ejército Nacional, en condiciones que la compañía surtidora considera anormales para poder trabajar sobre su servicio.