La Defensora del Pueblo, Iris Marín Ortiz, estuvo en Ocaña, Norte de Santander, para hacer seguimiento a la crisis humanitaria que se vive en el Catatumbo por cuenta de los enfrentamientos entre grupos armados ilegales.
“Estamos ante una de las crisis humanitarias más grandes y graves que ha enfrentado el Catatumbo, si es que esta no es la mayor, y el Catatumbo ha sufrido mucho”, aseguró la Defensora, quien advirtió, además, que en solo cuatro días se han registrado al menos 11.000 personas desplazadas.
Los municipios más afectados son Teorama, Tibú, El Tarra, Convención, Acarí, Ábrego y San Calixto. Asimismo, continúan los secuestros y el amedrantamiento general contra la población civil.
“Hay vulneración generalizada del principio de distinción, con ataques indistintos a combatientes y a personas civiles que son señaladas de colaborar con un grupo o con el otro por el simple hecho de ser familiares o personas cercanas”, agregó.
Entre las víctimas se encuentran líderes sociales, firmantes de paz y personas de especial protección constitucional, incluyendo niños y niñas.
Por esta razón, la Defensora hizo un llamado urgente a los grupos armados para que cesen las hostilidades, respeten el Derecho Internacional Humanitario (DIH) y permitan el acceso a las comunidades afectadas. “Se exige la habilitación de corredores humanitarios para la evacuación de personas en riesgo, el acceso a alimentos y atención médica, así como la recuperación de cuerpos de personas asesinadas para su identificación y entrega digna a sus familias”, pidió Iris Marín Ortiz.
A pesar de que la Defensora del Pueblo reconoce los esfuerzos iniciales de las autoridades para atender la crisis humanitaria en el Catatumbo, recalcó en la necesidad de una respuesta más robusta y coordinada. “Urge fortalecer la atención a las víctimas bajo los principios de la Ley 1448, ampliar la capacidad de Medicina Legal para atender las necropsias y reforzar la protección integral a alcaldes y personeros”.
De otra parte, las organizaciones sociales solicitaron a la Defensoría transmitir sus peticiones al ELN y al Estado Mayor de los Bloques, solicitud que ya ha sido remitida a los delegados del gobierno en las mesas de negociación.
“Seguiremos de cerca la evolución de la situación en el Catatumbo, brindando acompañamiento constante a las comunidades afectadas. Nuestros canales humanitarios continúan abiertos para aliviar el sufrimiento de la población civil”, puntualizó.