HOSTIGAMIENTO A LA COMUNIDAD CRISTIANA
declaraciones del mandatario en la Plaza de Bolivar
El concejal de Bogotá Andrés Barrios Bernal, del partido Centro Democrático, presentó una denuncia formal contra el presidente de la República, Gustavo Petro, ante la Comisión de Investigación y Acusación de la Cámara de Representantes. Según Barrios, las declaraciones realizadas por el mandatario el pasado 18 de marzo en la Plaza de Bolívar no solo contrarían la Constitución Política, sino que también podrían configurar delitos relacionados con hostigamiento y agravios contra la comunidad cristiana y evangélica.
En su discurso, el presidente Petro expresó: “Era el que había dicho que la opción preferencial era por los pobres y no por el rico epulón. Ahora vemos a los pastores traicioneros vendidos al rico de epulón y escupiendo sobre Jesús, el carpintero”. Estas afirmaciones fueron interpretadas por el concejal como un acto de discriminación y agresión verbal contra los líderes religiosos y sus congregaciones.
Señalamientos de presuntos delitos
Barrios argumentó que el discurso del jefe de Estado podría configurarse como una violación al Código Penal, en particular a los artículos 134B y 134C, que tipifican el hostigamiento agravado y los daños o agravios a personas o cosas destinadas a culto. Además, mencionó el artículo 203, que protege la libertad de culto y la dignidad de las comunidades religiosas.
“El presidente de Colombia tiene que aprender a respetar. Aquí estamos hablando de la comisión de dos presuntos delitos establecidos en el Código Penal: hostigamiento agravado y daños o agravios a personas o cosas destinadas a culto”, sostuvo el concejal.
Según Barrios, este no es un hecho aislado, sino que forma parte de un patrón de agresión contra quienes piensan diferente al gobierno. “Lo que estamos presenciando es un intento del gobierno de callar y agredir a quienes piensan diferente. Cuando Petro califica a pastores de traicioneros y vendidos no está ejerciendo su derecho a expresarse libremente, sino que esto constituye un conjunto de agresiones verbales que incitan al odio y la discriminación hacia esta comunidad”, afirmó.
Antecedentes de persecución religiosa en Colombia
El cabildante también recordó que, en la historia del país, las comunidades religiosas han sufrido persecución y ataques, y que este tipo de declaraciones desde el poder pueden generar un ambiente de estigmatización y vulnerabilidad para los creyentes. Por esta razón, insistió en la necesidad de que se investigue a fondo la conducta del presidente y que se tomen medidas para evitar que se repitan situaciones similares en el futuro.
Barrios concluyó su intervención advirtiendo que las declaraciones de Petro representan una violación a los principios democráticos y a la libertad religiosa, consagrados en la Constitución. Además, instó a la comunidad cristiana y evangélica a alzar su voz y a exigir respeto por sus creencias y valores.
Por ahora, la denuncia sigue su curso en la Comisión de Investigación y Acusación, el organismo encargado de examinar posibles faltas disciplinarias o penales cometidas por el presidente en ejercicio de sus funciones.