Escolares y comunidad educativa de una reserva natural llamada Amalaka, le escribieron de puño y letra al presidente de la República, Gustavo Petro, para que los ayude a frenar los peligros que acarrearía para ellos el paso de la doble calzada Santander – Popayán por su territorio.
27 años de trabajo
De acuerdo con esta comunidad, serían casi tres décadas de trabajo cuidando el medio ambiente los que se podrían echar a perder de darse el paso de la obra tal como se proyecta, por lo que han pedido la intervención del alto gobierno, con misiva formal e incluso con cartas escritas por los propios jóvenes que integran la reserva natural llamada Amalaka.
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“Señor presidente Gustavo Petro, Somos Amalaka una reserva natural e institución educativa donde albergamos, cuidamos y amamos LA VIDA, nuestra misión es cuidar de lo que con tanto esfuerzo hemos podido conseguir en 27 arduos años de trabajo, donde buscamos preservar la flora, fauna y la niñez. Ahora, estamos en riesgo de que puedan pasar por encima de nosotros, de nuestra agua y de nuestros sueños, es por eso que acudimos a usted, para que como gobierno nacional, garantice la protección de nuestro hogar. ¡No queremos que nos arrebaten nuestro hogar!”, dijeron los potenciales afectados.