La naturaleza se ensañó con Sudáfrica y donde en las últimas semanas no han parado las lluvias. El número de víctimas mortales por las inundaciones en la provincia de KwaZulu-Natal, la más afectada, aumentó a 443, según la cadena de televisión local eNCA. A esta dramática situación se suma la tragedia que viven los familiares de 63 personas que siguen desaparecidas.
El primer ministro, Sihle Zikalala, lamentó lo sucedido luego que lluvias torrenciales empezarán a caer en esta zona y provocara graves inundaciones al igual que cientos de pérdidas de vida humanas.
Los medios informaron que el 12 de abril, la provincia fue declarada por las autoridades como una zona de desastre. Por el fuerte invierno también se han afectado la infraestructuras de la provincia mientras que otras fueron completamente destruidas.
Según los medios locales, en la región se cerraron más de 500 escuelas debido a las inundaciones y resultaron dañados cerca de 100 colegios.
