James Rodríguez ha sumado más minutos en León en 18 días (281′) que en los cuatro meses que estuvo en el Rayo Vallecano (205′). El colombiano encontró el respaldo que no tuvo en España y, bajo la dirección de Toto Berizzo, ha pasado a convertirse en uno de los referentes del equipo, que lidera la liga mexicana. Para el técnico, uno de los grandes retos es lograr que James juegue como lo hace en la Selección, reconociendo que se trata de un desafío mutuo en el que superarse mutuamente ayudará a que todos mejoren.
El entrenador de León sigue disfrutando de la presencia de James y valora la rápida adaptación que ha tenido al grupo, así como su humildad y compromiso. “Su adaptación fue muy rápida, el grupo lo aceptó de inmediato. Tiene una relación cercana con sus compatriotas y con el resto de los compañeros, por lo que ya es uno más. Es un placer ver cómo se ha integrado a nuestra dinámica de grupo de forma tan rápida, humilde y comprometida, lo que nos llena de satisfacción a todos.”
James debe adaptarse a un equipo que presiona alto
Ante Pachuca, quedó claro que al colombiano le cuesta sin el balón. Para Berizzo, es necesario que James se ajuste al ritmo que quiere imponer el DT cuando el rival toma el control del juego, y al mismo tiempo, el resto del equipo debe entender qué hacer cuando el 10 tiene la posesión.
“Creo que es un desafío doble: para nosotros, entender cómo y dónde se mueve, qué pase va a dar, y para él, adaptarse a un equipo que necesita mucha dinámica, que exige presionar arriba y que no está acostumbrado a replegarse y esperar. Es un desafío mutuo que tenemos que aprender”, afirmó el entrenador.
Los delanteros deben aprovechar las asistencias de James
Berizzo también reconoció que la capacidad de James con el balón les otorga una ventaja, y que deben seguir trabajando en eso, sobre todo los delanteros, para sacar provecho de las ocasiones en las que el colombiano los deja en posición de gol, como ocurrió contra Pachuca.
“Hoy nos dejó de cara al gol con Iván; había tenido otras oportunidades que intentó filtrar, pero no entraron. Es un excelente habilitador. Nuestros atacantes también deben diversificar sus desmarques, buscando más el espacio que el balón al pie, porque él es un jugador que te deja de cara al gol. El conocimiento mutuo nos brindará resultados, rendimiento, y nos permitirá adaptarnos los unos a los otros. En ese proceso, todos seremos mejores”, concluyó el técnico.