
«La última pregunta se formuló por primera vez, el día en que la humanidad se bañó de luz»… así comienza uno de los mejores cuentos de ciencia ficción escrito por Isaac Asimov. Un cuento que nos lleva por un viaje hipotético desde la creación de la inteligencia artificial, hasta el fin de la raza humana en el universo.
Una invitación a leer su obra
Isaac Asimov, el renombrado autor de ciencia ficción, nos dejó un legado literario que sigue siendo relevante y fascinante en la actualidad. Su cuento «La Última Pregunta» es una obra maestra que trasciende el tiempo y el espacio, abordando la eterna pregunta de la inmortalidad humana de una manera ingeniosa y cautivadora.
En el cuento, Asimov nos lleva a través de la historia de la humanidad, desde la creación de las primeras computadoras hasta la evolución de la inteligencia artificial. La pregunta que impulsa la trama, «¿Puede la entropía ser revertida?», es una representación de la búsqueda eterna de la humanidad por trascender los límites del tiempo y la muerte.
(Te interesaría leer «Crítica a la crítica«, otra seccion editorial de Diario del Cauca)
A medida que las computadoras evolucionan y se vuelven cada vez más poderosas, la pregunta persiste, incluso cuando la humanidad se extingue. Esta reflexión sobre la inmortalidad, tanto a nivel individual como colectivo, plantea cuestiones profundas sobre la naturaleza de la existencia humana y la búsqueda incansable del conocimiento y la trascendencia.
Asimov nos invita a contemplar el papel de la tecnología en nuestra búsqueda de respuestas a preguntas fundamentales sobre la vida, el universo y todo lo demás. A medida que la computadora central evoluciona hasta convertirse en una entidad cósmica, nos hace reflexionar sobre la posibilidad de que la tecnología algún día trascienda la comprensión humana y alcance una forma de inmortalidad.
«La Última Pregunta» es un recordatorio de que, a pesar de los avances tecnológicos, algunas preguntas pueden permanecer sin respuesta y que nuestra búsqueda de conocimiento y trascendencia es lo que nos impulsa a seguir adelante como especie.
El cuento de Asimov, «La Última Pregunta», es una obra maestra que sigue desafiándonos a explorar cuestiones profundas sobre la inmortalidad, la tecnología y la búsqueda eterna de respuestas. A través de su narrativa ingeniosa, Asimov nos recuerda que, en última instancia, las respuestas a las preguntas más trascendentales pueden eludirnos, pero es la búsqueda misma lo que nos hace humanos y nos impulsa a seguir adelante en nuestro viaje hacia lo desconocido.

Un final casi bíblico (Alerta de spoiler)
El cuento finaliza de la manera mas magistral y divina posible. Cuando la última pregunta se realiza por última vez ( ¿Cómo revertir la entropía? ) Lo hace la entidad cósmica que primero fue la inteligencia artificial, con todas las mentes humanas copiadas en sí misma, y rodeada de un universo muerto sin tiempo ni espacio, la computadora intangible, o la entidad, llamada Multivac, encuentra la respuesta: ¡Y se hizo la luz!