Estudio en Nature revela cómo afecta el uso de redes sociales a la salud mental de jóvenes entre 11 y 19 años
Londres, 9 de mayo de 2025. Un nuevo estudio publicado en la revista científica Nature ofrece importantes hallazgos sobre la relación entre el uso de redes sociales y la salud mental en niños y adolescentes. La investigación, liderada por la Universidad de Cambridge, analizó cómo varía el impacto de estas plataformas en jóvenes con distintos perfiles de salud mental, incluyendo ansiedad, depresión y otros trastornos.
El equipo de científicos del Reino Unido basó su análisis en encuestas nacionales aplicadas a 3.340 adolescentes entre los 11 y 19 años. Según el estudio, al menos un 16 % de los encuestados presentaba alguna condición de salud mental diagnosticada. A estas encuestas se sumaron evaluaciones clínicas realizadas por expertos, junto con herramientas cuantitativas y cualitativas para medir los hábitos digitales de los participantes.
Los resultados revelan que no todos los adolescentes experimentan el mismo impacto del uso de redes sociales. Aquellos con antecedentes de ansiedad o depresión mostraron una mayor sensibilidad emocional ante la interacción digital, particularmente frente a contenidos relacionados con la apariencia física, la exclusión social o la validación a través de «me gusta» y comentarios.
Además, el estudio destaca que el efecto de las redes sociales no es necesariamente negativo en todos los casos. Algunos jóvenes con condiciones mentales leves encontraron en estas plataformas una fuente de apoyo emocional y un canal para expresarse o conectarse con otros que atraviesan experiencias similares.
“Los efectos son altamente individualizados y dependen tanto del contenido como del estado emocional de cada joven”, explicó uno de los autores principales del estudio. El equipo advierte sobre la necesidad de políticas más matizadas, que consideren estos matices antes de aplicar restricciones generalizadas al uso digital en adolescentes.
Este estudio refuerza la importancia de promover un uso consciente de las redes sociales, acompañado de orientación adulta y apoyo psicológico, especialmente en las etapas más vulnerables del desarrollo emocional.
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