¡Más de 100 referencias! David Lee el diseñador que está cambiando el mundo de los asados

La empresa alcanzó la meta de cero desperdicios, reutilizando los residuos de madera en productos como iniciadores de carbón que han tenido gran aceptación en el mercado.

Las creaciones de David Lee, diseñador y fabricante de piezas exclusivas para amantes del asado y chefs profesionales, han revolucionado el mercado colombiano con una propuesta que combina diseño, calidad y funcionalidad. Desde que en 2019 decidió convertir su pasión por la carpintería en un negocio, su marca que lleva su nombre no ha parado de crecer, alcanzando en 2024 un aumento del 14% con respecto al año anterior y superando las 600.000 unidades vendidas desde su fundación.  

Este crecimiento no es casualidad. En 2023, la marca vendió cerca de 110.000 unidades, y en 2024 la cifra superó las 125.000. La meta para 2025 es aún más ambiciosa: 200.000 unidades, con la mira puesta en alcanzar el millón en 2026. Una cifra impresionante teniendo en cuenta que son productos artesanales y elaborados 100% a mano. 

Lo que comenzó como la creación de tablas de madera para asados ha evolucionado en un completo universo de productos que celebra el arte del BBQ y el diseño funcional. Hoy, la marca ofrece bandejas, mesas auxiliares, portavasos y, más recientemente, una exclusiva línea de cuchillos desarrollada en colaboración con una reconocida marca de acero. Pero la innovación no se detiene: este año, lanzará una nueva colección que incluirá elegantes vasos de madera, ampliando un catálogo que ya supera las 100 referencias de producto, muchas de ellas auténticas piezas de colección.

Cada artículo es fabricado con madera teca certificada, reconocida por su resistencia a la humedad y durabilidad. Sin embargo, el compromiso de la marca no se limita al diseño y la calidad. En 2024, alcanzó un hito clave al estandarizar sus procesos de producción y lograr un impacto ambiental positivo: cero desperdicios.  

Los residuos de madera, ahora se transforman en productos innovadores. Un ejemplo destacado es el iniciador de carbón, fabricado con aserrín compacto que permite prender el carbón sin generar humo, es ideal para espacios cerrados como balcones. Además, los recortes más pequeños de madera se reutilizan para crear ediciones limitadas de tablas especiales, mientras que los restos no aptos para fabricación son empacados y vendidos, para que al momento del asado, los clientes los mezclen con el carbón y logren ese inconfundible sabor ahumado que tanto disfrutan en sus carnes.

Este espíritu innovador llevó a David Lee a abrir en 2024 La Bodega BBQ Market en la sabana de Bogotá, la primera tienda especializada en BBQ. En este espacio, los amantes del asado pueden encontrar desde carnes y condimentos hasta utensilios, delantales y accesorios exclusivos. La tienda no solo ofrece productos locales, sino también artículos importados relacionados con el mundo del barbecue. El éxito ha sido tal que en 2025 se planea la apertura de dos nuevos puntos de venta, además de una expansión hacia grandes superficies y tiendas especializadas tanto en Colombia como en el exterior.  

Cabe resaltar que, sus piezas son utilizadas por algunos de los chefs más reconocidos del país, como Jorge Rausch, Juan Diego Vanegas, Leo Morán y Tulio. Su obsesión por los detalles y la calidad lo ha llevado a perfeccionar cada creación, desde la selección de la madera hasta el acabado final, incluyendo el desarrollo de una cera especial a base de cera de abejas, vitaminas y aceites minerales que protege e impermeabiliza las piezas.  

“La calidad no debe ser un valor agregado, sino una condición natural”, afirma David Lee, cada diseño es el resultado de un proceso creativo que combina estética, funcionalidad y pruebas en el taller, donde el color y la veta de la madera dictan la composición final.  

Con una apuesta constante por la innovación, la sostenibilidad y la excelencia, David Lee se consolida como un referente en el diseño de utensilios y accesorios premium, llevando el arte del asado a otro nivel y demostrando que el buen gusto está, literalmente, en los detalles.