Hoy es el día 54 de la invasión de Rusia contra Ucrania. La ofensiva de Rusia no ha parado y los que se estaría esperando en los próximos días es un recrudecimiento de los bombardeos en las ciudades Jarkov y Kramator, también en las poblaciones de Donetsk, Vugledar, Marinka y Gradiv.
La peor parte la llevó este fin de semana de Leopolis y donde habrían muerto 11 personas consecuencia de una serie de ataques con misiles.
El alcalde, Andrey Sadovy, confirmó que en las últimas horas se registró el impacto de varios proyectiles y fuentes locales han situado el origen del ataque en la región del mar Caspio. Entre las víctimas habría varios niños.
Los misiles habrían impactado en infraestructuras militares, pero al menos uno ha alcanzado instalaciones con neumáticos y se ha desatado un aparatoso incendio.
Según las autoridades se informó que se escucharon varios impactos cerca de la principal estación de trenes y sin que se tenga constancia de civiles heridos en esta zona.
La ciudad de Leópolis, situada cerca de la frontera con Polonia, ha permanecido hasta ahora prácticamente intacta por el conflicto, con un único ataque en los alrededores desde el estallido de la guerra. Por el momento se desconocen cuáles han sido los objetivos alcanzados.
El jefe de la Administración Militar Regional de Dnipropetrovsk, Valentin Reznichenko, ha asegurado que las fuerzas rusas han bombardeado la zona, si bien ha matizado que “el 60 por ciento de los misiles fueron derribados por la defensa antiaérea”.
“La noche fue relativamente calmada, pero durante la mañana los invasores han disparado misiles contra la zona”, manifestó en Telegram.
Agregó “No somos una presa fácil”.
Las autoridades ucranianas han confirmado además que seis personas resultaron heridas en el ataque perpetrado el domingo contra un edificio de la Policía en la ciudad de Lisichansk, ubicada en la parte de la región de Lugansk (este) fuera del control de la autoproclamada República Popular de Lugansk, según ha recogido la agencia de noticias Ukrinform.