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El próximo jueves se retomará el juicio contra el expresidente de Francia, Nicolás Sarkozy, y luego que el Tribunal de Casación de París decidiera procesarlo por "corrupción" y "tráfico de influencias" . De ser hallado culpable Sarkozy podría pagara una pena diez años de prisión y un millón de euros de multa.  

La petición  fue de los abogados de uno de los acusados, el magistrado Gilbert Azibert, a causa de su estado de salud, según lo informó el portal La Vanguardia. 

Según lo informó rtve, "A Sarkozy se le acusa de sobornar a Azibert, magistrado del Tribunal Supremo, para que le ayudara en otra causa en la que está imputado". 

Sarkzoy, presidente de Francia entre 2007 y 2012 y retirado de la política desde 2016, niega todas las acusaciones e insiste en que se trata de una campaña en su contra.

El expolítico conservador tiene otros dos procesos abiertos por financiación ilegal de sus campañas electorales.

Por qué se lo acusa:

 La Fiscalía acusa al expresidente de ofrecer un puesto bien remunerado en Mónaco al juez Azibert a cambio de información confidencial sobre la causa en la que se le imputa por aceptar fondos ilegales de la heredera de la empresa cosmética L'Oreal, Liliane Bettencourt, para su campaña de 2007.

Los investigadores pincharon en 2013 los teléfonos de Sarkozy y de su abogado, Thierry Herzog, mientras seguían la pista a otra de las supuestas fuentes ilegales de financiación, la que provenía de la Libia de Muamar Gadafi. En el transcurso de las pesquisas, descubrieron que ambos usaban móviles registrados con nombre falso. Sarkozy usaba el de Paul Bismouth.