Para ver más noticias escalofriantes ingrese AQUÍ
En Popayán, con la avalancha de acontecimientos que no dan respiro en este agitado 2018, que llegó con nuevos gobernantes, pandemia, desbarajustes climáticos, violencia y remató con la muerte de Maradona, ya nos habíamos olvidado de la figura de César Cristian Gómez Castro, el polémico exalcalde de Popayán. Muchas portadas dieron sus líos judiciales y su también sobresaltado periodo de gobierno. Sin duda Gómez Castro pasó a la historia ‘patoja’ como el alcalde más suspendido. Y eso no se lo quita nadie, son hechos y como tal son incontestables. La primera investigación penal lo llevó a la cárcel, luego vino una suspensión de 11 meses por irregularidades en la contratación. Luego, finalizando su periodo como alcalde fue suspendido por la Procuraduría General del a Nación por su participación en política. Gran parte de su tiempo y energía como mandatario se le fue defendiéndose en los estrados judiciales.
Pero ha vuelto a aparecer, y por partida doble. En estos días circuló una foto con el exalcalde en los barrios Primavera Sur y Villa Elena, al suroriente de la ciudad, haciendo una especie de inauguración simbólica. Los vecinos estaban agradecidos con el exalcalde porque durante su administración les había conseguido los recursos para la pavimentación de una de sus vías principales. Algunos detractores salieron a criticar esta actuación considerando que se trataba de una ‘usurpación’ grosera de funciones, y que un exalcalde nada tenía que inaugurar. Pero el asunto no tuvo mayor trascendencia y no pasó de la anécdota, pues finalmente se dijo que los vecinos eran libres de agradecer a quien les diera la gana. Punto.
Pero la segunda aparición nos deja más preocupados. Se trata de una auditoría regular a la vigencia fiscal 2019 al municipio de Popayán, administración “Vive el Cambio” en cabeza del ex alcalde César Cristian Gómez Castro, realizada por la Contraloría Municipal de Popayán. Esta hizo hallazgos fiscales por valor de $3.623.094.791. El informe reza: En primer término se encuentra una disminución de los ingresos del municipio de Popayán en cuantía que supera los $2.000.000.000 con posterioridad a la celebración del contrato suscrito entre el municipio de Popayán – Secretaría de Tránsito y EMTEL S.A. E.S.P., cuyo objeto es: “Prestar servicios de modernización y optimización de los servicios administrativos de la Secretaría de Tránsito y Transporte del municipio...”, con un término de duración de 15 años.Dicho contrato inició su ejecución en el año 2018 evidenciándose que entre el año 2018 y el 30 de octubre de 2019 la administración municipal dejó de percibir recursos por valor de $2.185.182.749.
Igualmente se configuró hallazgo por el pago de $1.098.455.026, dineros entregados de forma directa a los sindicatos bajo la denominación de “aportes para el desarrollo sindical”, sin observancia de las disposiciones constitucionales y legales. En resumen, dineros entregados en mano, pérdida de ingresos, malos manejos, detrimento patrimonial. Se habla de una apertura de investigación que realmente no recuperará nada de lo perdido. ‘La leche ya está derramada’, y nos queda más que llorar o mejor olvidarlo y seguir.