En la plenaria del Concejo de Popayán, la inspectora de Policía Urbanística, presentó una relación de inmuebles que serán demolidos por parte de la Alcaldía. Se trata de edificaciones objeto de procesos sancionatorios. Dichos inmuebles están ubicados en diversos sectores de la ciudad. Se destaca especialmente un edificio de 4 plantas de la fundación Mundo Mujer que violó la norma de la altura sobrepasando 50 cm y se le dictaminó demolición total en primera instancia. La decisión final deberá ser tomada por el Ministerio de cultura pues se encuentra en el Centro Histórico de Popayán.
Otro caso importante, es el de un inmueble propiedad de un exconcejal payanés, que construyó en una zona verde y será objeto de demolición por parte de la Secretaría de Infraestructura. Nos parecen muy importantes los resultados de esta dependencia de planeación Municipal, y lo venimos destacando desde hace un tiempo. Resaltamos el trabajo juicioso, a pesar de todas las limitaciones presupuestales, que realiza la Inspección de Policía Urbana de Popayán. El año pasado pasaron un reporte de multas por infracciones a la normas de construcción, nada menos que $1.000 millones. Destacamos ese trabajo por dos razones, siempre es necesario resaltar la eficiencia y los resultados del trabajo en la administración pública aún con recursos limitados como en esta dependencia. Si todos los funcionarios tuvieran este espíritu a la hora de trabajar desde la ética y la disciplina, estaríamos viviendo otra realidad. Segundo, ese celo con el que se está sumiendo la tarea de vigilar los atentados contra las normas de la construcción en Popayán es muy necesario, porque aquí hay demasiados excesos, abusos que quedan impunes, generando desorden y caos urbanístico. Según la Ley 388 de 1997, toda actuación o conducta que vaya en contra de los planes de ordenamiento territorial, de los instrumentos de planificación, las licencias o cualquier norma urbanística, constituye infracción urbanística, que a la luz de la Ley 1801 de 2016 (Código Nacional de Policía) amerita una sanción que puede ser multa, cierre temporal o definitivo, o de demolición de la obra. Esperamos que esta dependencia reciba los recursos que necesita y que tenga un espacio idóneo pues se requiere su presencia permanente y su acción oportuna para frenar la acción de los ciudadanos abusivos. Su trabajo es sumamente necesario y valioso para una ciudad como Popayán que tiende al caos en materia urbanística. Sería bueno que se dieran una vuelta por barrios como Santa Inés, Moscopán y aledaños, donde las zonas verdes originales fueron incorporadas a las viviendas en forma de jardines, garajes o apartaestudios y nadie dijo nada.
