El comportamiento del dólar en Colombia continúa generando expectativas entre los expertos, que apuntan a que la divisa se mantendría en niveles altos durante gran parte de 2025, debido a factores externos y a un inicio de año marcado por la cautela en los mercados internacionales. Según el economista jefe para la región Andina en BTG Pactual, Munir Jalil, la moneda estadounidense muestra signos de fortaleza que llevan a los analistas a proyectar su desempeño en distintos escenarios.
“Estamos previendo que el primer semestre esté marcado por cotizaciones con un precio del dólar relativamente alto, al nivel del que venimos observando de $4.400″, afirmó el experto, teniendo en cuenta que el 20 de enero se posesiona el empresario Donald Trump como presidente de Estados Unidos con una amenaza arancelaria para China, México y Canadá.
Dicho panorama, caracterizado por un contexto global volátil, podría intensificarse en los primeros meses del año, con proyecciones que no descartan que la divisa alcance los $4.500, un valor no visto en el país desde mayo de 2023. La proyección se explica por el índice dólar ( DXY ), que mide la fortaleza de la moneda frente a otras divisas principales, y que registró comportamientos que influyen en las tasas de cambio en la región.
“De hecho, el banco no descarta la posibilidad de que en la primera mitad del año el dólar toque los $4.500″, aclaró la publicación económica.
Segundo semestre de 2025
Sin embargo, las perspectivas para la segunda mitad del año podrían ser más optimistas. Munir Jalil explicó que, con un escenario económico global más estable, el tipo de cambio podría registrar una disminución moderada. “El dólar en Colombia podría bajar a niveles alrededor de los $4.200 y mantenerse allí”, aseguró el economista. El posible descenso estaría vinculado a una combinación de factores, incluyendo un ambiente internacional más tranquilo y una mayor estabilidad económica local.
El impacto político también parece ser una clave variable en las expectativas a mediano plazo. Jalil señaló que el optimismo derivado del proceso electoral previsto para el primer semestre de 2026 en Colombia podría generar adicionalmente una leve caída en la cotización de la moneda estadounidense hacia finales de 2025.