Rifirrafe por cifras de homicidios: Entre armas ilegales y narcotráfico

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Galán y Petro chocan por la violencia en la capital


El presidente Gustavo Petro generó polémica al afirmar que los homicidios en Bogotá ya no responden a pandillas sino a mafias del narcotráfico que usan los aeropuertos para mover cocaína producida en los Llanos Orientales y la sabana de Bogotá. Sin embargo, el alcalde Carlos Fernando Galán rechazó esa narrativa. “De cada cinco homicidios adicionales este año en el país, solo uno ha ocurrido en Bogotá”, aseguró, insistiendo en que los datos no sustentan la idea de que la capital sea el principal motor del incremento nacional.

Un reto fuera de control
El secretario de Seguridad, César Restrepo, alertó que el aumento de homicidios está estrechamente ligado a la proliferación de armas ilegales. “Más de 21.000 armas circulan de manera irregular, además de 10.000 granadas adquiridas por bandas criminales”, denunció. Restrepo pidió al Gobierno nacional acciones urgentes para rastrear las armas dejadas tras el conflicto armado y desactivar el mercado negro que alimenta el crimen organizado en la ciudad. También advirtió que las cifras de homicidio no deben minimizarse por provenir de enfrentamientos entre delincuentes, ya que el derecho a la vida debe ser garantizado para todos.

Expertos señalan falta de recursos y estrategia nacional
Para el exsecretario de Seguridad Hugo Acero, la situación actual es grave y responde a una combinación de factores. Aunque reconoce el trabajo del gobierno distrital, criticó la descoordinación heredada de administraciones anteriores y la falta de recursos asignados por el Gobierno nacional. “El 60 % de los helicópteros están fuera de servicio por falta de mantenimiento. ¿Así cómo vamos a enfrentar a las disidencias?”, cuestionó.

A pesar de las diferencias entre mandatarios, hay consenso en que el narcotráfico, el tráfico de armas y la falta de inversión en seguridad están detrás del fenómeno. Lo cierto es que Bogotá, aunque no lidera el aumento nacional, sigue siendo un foco de preocupación y requiere acciones contundentes y articuladas para enfrentar una violencia cada vez más compleja y profesionalizada.