Martín Alberto Riascos dio a conocer su determinación en plena audiencia y se justificó en presuntas amenazas en su contra en medio del proceso en el que defendía al estadounidense, sospechoso del mencionado delito.
La curiosa frase de despedida que utilizó dejó en evidencia la indisposición frente a la situación que vivía por los cuestionamientos de parte de muchos interesados en el caso. Riascos publicó desde su cuenta personal de Instagram un mensaje punzante frente a los ataques que recibió en ese mismo espacio, además de otros más amenazantes, que llevaron a su decisión.
“En un país donde ejercer la hermosa profesión de abogado penalista es un delito, donde defender derechos es un pecado, donde las amenazas pululan, donde las garantías procesales son para todos menos para los abogados… es incierto este noble ejercicio”, escribió.
Es importante destacar que en Colombia, como en cualquier Estado de derecho, los acusados de cualquier delito tienen la opción a una defensa, y el Estado está en la obligación de proporcionarla.
De ahí, es legítimo que un abogado defienda a cualquier criminal pues hace parte de las labores por las que los litigantes perciben sus ingresos. Cabe resaltar que Riascos reconoció que el propio Poulos le pidió la renuncia al caso de Valentina Trespalacios, que se ha convertido en tema de interés nacional.
Este es uno de los casos de feminicidio más mediáticos que han sucedido en los últimos tiempos en Colombia
