Timbío ha sido uno de los más de veinte municipios que hasta la fecha las autoridades han logrado relacionar con la red de corrupción que desde hace casi diez años tejió el senador caldense Mario Castaño.
De acuerdo con lo que hasta ahora han logrado esclarecer los investigadores de la Fiscalía, los tentáculos del caldense llegaron hasta el Cauca, no solo hasta Piendamó y Suárez como se supo en un primer momento, sino que incluso Timbío se vio afectado por el apetito del paisa respecto a los recursos públicos.
Mitigación de riesgo
De acuerdo con uno de los cómplices de Castaño, con el remoquete ‘El Pato’, en Timbío habrían logrado hacerse con el control de un contrato para mitigar riesgos y cuyo monto ascendió a $10 mil millones de pesos. Recursos de los cuales, tal como tenían diseñada la estratega de contratación, tomarían entre un 10% y un 15%.
El truco consistía en influir en el diseño de los pliegos de contratación, llegando a lo que se conoce como pliego sastre, de manera tal que solo el escogido por Castaño y compañía, se quedara con el jugoso contrato. Un modus operandi que llevó a Castaño a convertirse en un político de chequera profunda en el viejo Caldas, en donde manejaba a su antojo la contratación de casi todos sus municipios.
De esta manera se siguen destapando detalles que podrían abarcar a más y más municipios en esta parte del país dada la cantidad de grabaciones en poder de la Fiscalía, cerca de 3 mil, y que siguen arrojando luz sobre la red de asalto a los recursos públicos que tejió Castaño desde 2014, cuando pasó de ser representante de su departamento, Caldas, a senador en 2018, consolidando su influencia para direccionar los dineros públicos a su favor.