Jesús Arcos Solano
A los pocos años de egresados, algunos compañeros con los que nos habíamos graduado en la Normal (1.959), iniciaron el penoso desfile hacia la eternidad. Entre ellos: Armando Carabalí, Ramiro Imbachí, Silvio Plaza y, Macedonio Garnica. Los 3 primeros cursaron los 6 años normalistas (1º a 6º); el otro, sólo 6º. Lamentamos su fallecimiento; compartimos la vida estudiantil con el grupo que conformamos la 1ª Promoción. Como los designios de Dios se cumplen inexorablemente, también otros, en años posteriores, van falleciendo, tales como: Luis Arcos Sarria, Arcesio y Jacinto Bolaños, León Segundo Bravo, Rafael Hoyos, Josué Caicedo, Jesús Omar Ortega. Todos los 7 mencionados alcanzaron a participar activamente en la preparación y actos de conmemoración de las “Bodas de Oro” (50 Años) 1ª Promoción (1.959), egresados del Claustro Normalista. En este festejo, estuvimos 13 de los 18 graduados, sólo faltó 1, Santos Muñoz. Como vemos, hay 11 fallecidos, sobrevivimos 7; ya con las dolencias propias de la edad. En la ciudad quedamos 4, oriundos de pueblos caucanos: Benito Quirá (Puracé), Gabriel Gómez (Santa Rosa). Oscar Hurtado (Tunía), Jesús Arcos (El Bordo). Los otros 3 son: Rodrigo Aranda (Cajibío), vive en Cali; Santos Muñoz (Belén- N.) vive en San Pablo-N, y Afranio Plaza (Mercaderes) reside en Bogotá. Este ha sido el trascurrir de esta pléyade de Normalistas, que sin lugar a dudas, dejamos en alto, el legado confiado por la Institución, que nos formó para el ejercicio de la misión nobilísima de enseñar. Dios nos ubicó en la tierra para cumplir una labor, que poco se valora en su verdadera dimensión. Sólo el Creador podrá recompensarnos. La historia y las personas que fueron testigos de nuestro proceder, dictarán su veredicto. Con todos los compañeros mantuve las mejores relaciones; todos fueron mis sinceros amigos. Y para recordar el deceso del compañero Josué Caicedo Muñoz; quien el próximo1º de Mayo, cumple 4 años de fallecido, rezaremos plegarias por su eterno descanso y que caigan flores sobre su tumba. Para los demás fallecidos, oraciones; y para que Dios los tenga en su gloria. Igualmente para la Comunidad Marista y Profesores seglares, que ayudaron a forjar nuestra personalidad; que hoy duermen el sueño de los justos; que el Todopoderoso, vele por ellos. Finalmente, que todos los que ya gozan de la presencia del Supremo Creador, desde el cielo, nos hagan llegar copiosas bendiciones.