El segundo trimestre del año se muestra una rápida reducción en la actividad de la economía, sobre todo en los bienes durables.
La economía colombiana no ha demostrado un buen pronóstico y solo está iniciando el segundo trimestre del año. La evidencia está en la desaceleración del país, aún cuando las cifras del 2022 fueron favorables. Tal afirmación resulta, luego de notar que las actividades económicas están perdiendo dinamismo. Por este motivo, los analistas prevén que esta tendencia se mantendrá así en los próximos meses.
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Precio de la gasolina sube otros $600 en julio
Ayer anunciamos que el precio de la gasolina volvió a incrementar este mes, fue la primera noticia del mes que vio afectada a la economía de los colombianos. Esto ocurrió a pesar de que el Producto Interno Bruto (PIB) del primer trimestre creció en un 3 %, cifra por encima de lo esperado.
Sin embargo, no son alentadoras las proyecciones para el dato del segundo trimestre, que el Departamento Administrativo Nacional de Estadística (DANE) publicará en agosto.
El impacto de la desaceleración dependerá de qué tan fuerte está y de que se tomen medidas para impulsar el crecimiento, en especial en los sectores más afectados como la construcción, la industria, el comercio, minería y la agricultura, entre otras.
La presidente de AmCham Colombia, María Claudia Lacouture, asegura que “las acciones público-privadas deben enfocarse a ofrecer un entorno más favorable para la dinámica económica y el crecimiento industria”.
Proyección del segundo semestre 2023: Desaceleración
En su reciente informe sobre Colombia, la calificadora Fitch Ratings dice que espera que el crecimiento del país se desacelere significativamente hasta un 1,5 % en 2023, desde el 7,3 % en 2022, debido a un endurecimiento monetario agresivo y un importante ajuste fiscal, incluida la reducción del subsidio al combustible.
Por su parte, Sergio Olarte, economista principal Scotiabank Colpatria, asegura que en el segundo trimestre del año se muestra una rápida reducción de la actividad económica, sobre todo en aquellos bienes durables que son más sujetos a la desaceleración de los ingresos de los hogares, que dejan de comprar vehículos, computadores o celulares.
Además, Olarte afirma que esta situación también se afecta la venta de vivienda, porque con una inflación alta y unas tasas de interés también altas, se hace solo el consumo necesario y se ahorra un poco más.
Daniel Velandia, managing director y economista en jefe de Research en Credicorp Capital, coincide con Olarte, y señala que la desaceleración de la actividad económica se ha visto reflejada en los datos como son la caída de las ventas de vivienda, las compras de vehículos, la confianza del consumidor y empresarial, al igual que en el Índice de Consumo de los Hogares, que mide Raddar, el cual muestra una contracción.
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Ya comenzó la desaceleración de la economía
Carolina Monzón, gerente de investigaciones económicas de Itaú Colombia, explica que en el segundo trimestre del año se observaron factores como niveles de inflación altos, crecimiento de la cartera de crédito y caída de la producción de la industria manufacturera y ventas del comercio en cerca al 6 % en ambos casos, lo cual representa un sesgo negativo.
“En Itaú esperamos un crecimiento de 1,4 % en el segundo trimestre que es un dato mucho más bajo del que se registró en el trimestre anterior de un 3 %”, detalla.
Agrega que en el segundo semestre, la expansión podría estar en niveles del 0,5 %, lo que demuestra que se entrará en un proceso de desaceleración gradual.
Balanza comercial de Colombia
Conforme a lo identificado por Monzón, un factor favorable que es el cierre de déficit de la balanza comercial de Colombia, se está exportando más de lo que se importa, debido a los niveles de la tasa de cambio.
Por su parte, Daniel Velandia dice: “Vamos a ver una desaceleración anual, ya la estamos observando y seguramente a lo largo del año la tendencia va ser evidente. Creemos que la economía en el segundo trimestre va a registrar un crecimiento de cerca de la mitad de lo que vimos en el primer trimestre que es de un 1,7 % que es nuestra estimación puntual”.
A su vez, Sergio Olarte indica que, para el último semestre del año, lo que se observa es que la inflación está desacelerándose y es posible que comiencen a bajar las tasas de interés. “Si bien se ve una consolidación de la desaceleración, se sigue previendo que en total la economía este año puede crecer alrededor del 1,8 %”.