Excelente noticia para la industria de la joyería, pues en la República de Angola, al sureste de África, fue hallado un diamante de tonalidades rosas que ha capturado la atención del mundo, pues su descubrimiento en la zona minera de Lulo, supone un hallazgo histórico en los últimos 300 años.
De acuerdo con la minera australiana, Lucapa Diamond Company, la piedra preciosa tiene 170 quilates y ha sido bautizada como ‘Lulo Rose‘ (la Rosa de Lulo), en referencia a la mina de Lulo en la que ha sido hallada por Lucapa Diamond, Endiama y Rosas & Petalas, que conforman la Sociedad Minera de Lulo (SML).
El inusual diamante será vendido a través de una licitación internacional realizada por la empresa estatal de comercio de diamantes de Angola, Sodiam, y probablemente alcanzará un precio ‘deslumbrante‘.
El diamante es de tipo IIa, una de las formas más raras y puras de las piedras naturales por lo que el Gobierno de Angola, anunció que «este enorme y espectacular diamante rosa encontrado en Lulo sigue posicionando a Angola como un importante actor en el escenario mundial«, ha declarado al respecto el ministro de Recursos Minerales de Angola, Diamantino Azevedo.
Lulo, un yacimiento de piedras preciosas
En este yacimiento se han encontrado hasta la fecha los dos diamantes más grandes del planeta, el primero de ellos con un total de 404 quilates. En este sentido, el ‘Lulo Rose‘ sería el quinto diamante más grande hallado en la mina y el número 27 en la lista de piedras preciosas con 170 quilates.
Para tener una idea del valor de esta pieza en la industria de la joyería, el diamante rosa más caro que se ha vendido hasta la fecha ha sido el ‘Pink Star‘ (La Estrella Rosa), que con 59,6 quilates alcanzó un precio de 71,2 millones de dólares en la casa de subastas Sotheby’s de Hong-Kong en 2017. Por ello, este diamante de 170 quilates podría tener un precio todavía más disparatado al que habría que sumarle también la inflación imperante en buena parte del mundo.
De cada diez mil diamantes, solo uno suele tener esta tonalidad rosada, por lo que lo hace extremadamente raro dentro de un objeto que ya de por sí es raro. Sin embargo, las condiciones políticas y económicas mundiales hacen que muchas de estas piezas se consigan a través del trabajo esclavo o en condiciones realmente malas especialmente en África, lo que nos recuerda a la película ‘Diamante de sangre’ del año 2006.
